“El cuidado de las enfermeras en pacientes con demencia es fundamental para garantizar su bienestar y calidad de vida”. Esta es una de las principales conclusiones del webinar Cuidados de enfermería en pacientes con demencia con enfoque centrado en la persona, organizado el 25 de junio por la Confederación Española de Alzheimer y otras Demencias (CEAFA) y la Sociedad Española de Cuidados Paliativos (SECPAL), la tercera sesión de la serie de conferencias impulsadas en el marco del convenio firmado en julio del pasado año por ambas entidades.

La charla contó con la intervención de Mª Teresa Gea Soriano, enfermera, miembro de la junta directiva de la Sociedad Valenciana de Medicina Paliativa (SVMP) y vocal de la Asociación Española de Enfermería en Cuidados Paliativos (AECPAL), quien defendió el papel clave de los profesionales de Enfermería como referentes en el acompañamiento a personas con demencia y sus familias. “Nuestro trabajo se centra en acompañar durante todo el proceso, siendo soporte y apoyo en cada pérdida, en cada situación y en cada toma de decisiones, sobre todo en la última etapa de la enfermedad, donde nuestros objetivos irán únicamente encaminados al bienestar de la persona”, explicó.

Estos cuidados de enfermería, añadió, “nacen del reconocimiento de la individualidad, sin perder de vista la importancia de recuperar el protagonismo del paciente como persona, no como un enfermo; cuidados que le colocan en el centro de la atención, como protagonista de su propia historia, con valores, con creencias, con deseos y preferencias que deben ser respetadas”.

Cuidados individualizados y adaptativos

Durante el webinar, se subrayó la importancia de diseñar un plan de cuidados individualizado, ajustado a las distintas fases de la enfermedad. En las leves o moderadas, el objetivo será ralentizar la evolución, mientras que en fases avanzadas se priorizará el confort y la calidad de vida. “El cuidado debe adaptarse a las necesidades reales de la persona y su familia, en un entorno seguro y deseado”, insistió Gea Soriano.

El enfoque integral del cuidado abarca aspectos físicos, emocionales y sociales, y se extiende también al entorno del paciente. Durante la sesión, la experta se refirió a los trastornos de alimentación que se producen en procesos de demencia, en los que la disfagia y la pérdida de peso son comunes. Por ello, indicó, “es clave adaptar la dieta y transformar el momento de la ingesta en una experiencia tranquila y placentera”.

En cuanto a la higiene y el cuidado de la piel, señaló que es necesario promover la autonomía en el aseo personal, cuidar la hidratación “e inspeccionar la piel para prevenir complicaciones”. Otro aspecto fundamental es el sueño y el descanso, donde las enfermeras juegan un papel fundamental, ayudando a establecer rutinas, identificar alteraciones e interviniendo con estrategias no farmacológicas.

Respecto a la polifarmacia y adecuación terapéutica, recordó que es necesario prescribir lo estrictamente necesario, evitando tratamientos innecesarios o desproporcionados. Por último, en el ámbito de prevención de caídas, destacó que es conveniente “acondicionar el entorno del hogar y valorar la necesidad (o no) de sujeciones desde el respeto a la dignidad de la persona”.

Papel esencial de las personas cuidadoras

En cuanto al entorno del enfermo, Teresa Gea destacó que cuidar al cuidador es también cuidar al paciente. “La familia es el principal agente de cuidados, y también necesita apoyo, orientación y reconocimiento”, apuntó la enfermera, antes de añadir que las personas cuidadoras “deben sentirse visibilizadas y cuidadas”.

La incertidumbre, la carga emocional y física, y el riesgo de claudicación familiar hacen imprescindible un acompañamiento activo por parte del equipo de enfermería y del resto de profesionales implicados. “La toma de decisiones compartida, el respeto a las preferencias del paciente y el acompañamiento continuo son pilares esenciales del cuidado enfermero en demencias, cuyo objetivo último es proteger la dignidad, aliviar el sufrimiento y ofrecer un soporte humano, técnico y emocional de calidad”, concluyó.

Esta jornada virtual forma parte de las actividades planteadas en el plan operativo 2024 de CEAFA y dentro del proyecto Entornos amigables y solidarios con las demencias, una iniciativa que tiene el objetivo de contribuir a la normalización, percepción, consideración y complicidad hacia las personas con alzhéimer y otras demencias.